Muy a menudo las personas con enfermedades crónicas o terminales sienten que demuestran falta de fe si sus emociones parecen fuera de control. Este punto de vista añade sentimientos de culpa y vergüenza a la ya difícil situación física en que se encuentran. Las personas que rodean a la persona enferma pueden tener dificultad para entender las tensiones emocionales y espirituales que el/la paciente experimenta. Debido a su falta de comprensión, puede resultarles difícil apoyar o responder en forma efectiva a las necesidades de la persona enferma.
Incrustada en la peña es un relato personal de la autora sobre su propia lucha con una enfermedad seria, y las fuentes de fortaleza que le ayudaron a hacerle frente a su crisis de salud. Este libro trata en forma realista los sentimientos y las luchas de fe. Rose Arroyo no niega sus sentimientos y sus dudas, sino que señala a los recursos que le ayudaron a tener fortaleza en medio de su situación de enfermedad.